El puerto de Barcelona no descansa ni los fines de semana, en tiempo de paz pocas veces se ha cerrado al tráfico a no ser que fuera por un temporal o un evento único o histórico. El 22 de junio de 1957 caía en sábado y prácticamente en vísperas de la verbena de San Juan hubo pocas entradas. Por ejemplo, llegó el transatlántico Cabo de Buena Esperanza procedente de Buenos Aires, el italiano Rosalia procedente de Génova con un cargamento de trigo.

Otro mercante fue el inglés Pozarica, el norteamericano A. M. Patch con una carga militar y el danés Anita Dan que procedente del puerto finés de Hängo en sus bodegas llevaba un cargamento de 817 toneladas de pasta de madera.

Este último tiene una historia que contar, fue construido en Alemania en 1956, navegó para la marina mercante danesa hasta 1967 y fue comprado por la Royal Navy para convertirlo en un buque polar para patrullar la zona del Territorio Británico Antártico con el nombre de HMS Endurance.
El Anita Dan
Sería construido para la naviera Lauritzen Lines en los astilleros alemanes de Kröger-Werft en la localidad de Schacht-Audorf, fue puesto a flote el 26 de mayo de 1956 y entregado el 13 de octubre del mismo año. Desplazaba 2.641 toneladas de registro bruto con una eslora de 86,5 metros por 14 metros de manga y 6,9 metros de calado. Era propulsado por un motor diésel Burmeister & Wain de 3.200 IHP. que le daba 14 nudos de velocidad.

Su casco recibió la calificación 1A del Lloyd’s Register para navegar en el hielo, era capaz de enfrentarse a capas de hielo de 30 a 80 cm. dependiendo de si navegaba en aguas polares o en el Mar Báltico.

Tras once años de vida marinera con la bandera danesa, periodo en el cual recalaría en diversas ocasiones en el puerto de Barcelona, la Royal Navy se fija en él como el sustituto ideal del barco polar HMS Protector (A-146), cuya construcción se remontaba a 1935.

La venta se realiza el 28 de marzo de 1967 y tras su adquisición pone rumbo a los astilleros de Harland & Wolf para su conversión.
El HMS Endurance
Su capacidad para navegar en el hielo ya fue un punto a favor para su adquisición, su casco se pintó de rojo brillante y su obra muerta de blanco para ayudar a la visibilidad, este esquema de color propició que su tripulación lo apodara como “The Red Plum” o “La Ciruela Roja”. A pesar de sus colores el barco se militarizó, ya que pertenecía a la Royal Navy y entre sus misiones estaban las de patrullar en las aguas de soberanía británica en la Antártida. Además, con él se daría apoyo al equipo del «British Antarctic Survey» que tiene cinco bases en el continente helado y más allá de este grupo podría realizar misiones hidrográficas y oceanográficas allí donde fuera necesario.


Se le instalaron dos cañones Oerlikon de 20 mm. y un hangar y una cubierta de vuelo a popa para poder operar con dos helicópteros Wasp, que con el paso de los años estos helicópteros cambiaron a Westland Wessex y los últimos fueron los Westland Lynx. Ahora su eslora era de 92 metros y su desplazamiento aumentó hasta las 3.600 toneladas, su tripulación sería de 119 hombres incluido un destacamento de los Royal Marines y había espacio adicional para otros 12 científicos.

Algo de su historia
Desde 1967 a 1972 realizó diversas campañas antárticas en solitario y colaboración con otros buques de investigación del Reino Unido. En 1972 participó en el rescate del crucero Linblad Explorer que embarrancó en La Plaza Point en la Isla del Rey Jorge.

Pero como buque de guerra tuvo que demostrar su valía en la Guerra de las Malvinas de 1982, entre otras acciones destaca el ataque al ARA Santa Fe (S-21) el 25 de abril de 1982. Días antes se puso en marcha la Operación Paraquet en donde un grupo de combate de la Royal Navy junto a un destacamento de los Royal Marines intentarían recuperar el control de la isla de Georgia del Sur. Los buques de guerra enviados fueron las fragatas HMS Brilliant (F-90), HMS Antrim (D-18), HMS Plymouth (F-126) y HMS Endurance (A-171) que actuaba como patrullero.

Sin embargo, el 25 de abril el submarino ARA Santa Fe es detectado por el radar de un helicóptero Westland Wessex de la HMS Antrim e inmediatamente se lanzan al ataque. El ataque al submarino argentino fue realizado por los helicópteros de los buques ingleses, le lanzaron cargas de profundidad, un torpedo y lo ametrallaron desde el aire. Finalmente fueron dos Westland Wasp del HMS Endurance quienes le dieron el golpe de gracia al atacarlo con dos misiles AS-12 que le atravesaron la vela.

Con el submarino gravemente dañado su comandante, el capitán de corbeta Horacio Alberto Bicain, decidió llevar al submarino a tierra, desembarcar a toda su tripulación y unirse a los combates en la isla de Georgia del Sur.

El último acto de esa guerra tuvo lugar a bordo del HMS Endurance cuando los últimos militares argentinos se rindieron en una base establecida en South Thule en las Islas de Sandwich del Sur el 20 de junio de 1982.
La recta final
Los siguientes años hasta su retirada del servicio activo fueron algo complicados, al acabar la guerra el barco contaba con casi treinta años en sus cuadernas, además, había sido utilizado mucho más allá de su cometido original de mercante como Anita Dan y el ahora HMS Endurance comenzaba a padecer el paso de los años.

Y para complicarlo todo, en 1989 chocó contra un iceberg, aunque fue llevado a dique seco y reparado, una minuciosa inspección determinó que su casco estaba dañado a causa de la edad y no era recomendable que volviera a la Antártida.
En 1991 es dado de baja y reemplazado en 1990 por otro HMS Endurance con el mismo numeral, un rompehielos construido por los astilleros noruegos de Ulstein Hatlo bautizado originalmente con el nombre de Polar Circle.

Más información:
Ficha e historial del HMS Endurance en la página web de la Fundación Histarmar
Datos adicionales en la página web de Globalsecurity.org
El HMS Endurance en la página web de: The Historic Dockyard Chatham