En los años cincuenta y sesenta, gracias al Programa de Asistencia Mutua entre Estados Unidos y España, se transfirieron diversos buques de guerra que contribuyeron a modernizar parte de la flota de la Armada Española. La mayoría de estos buques eran veteranos de la Segunda Guerra Mundial, mientras que otros habían participado en conflictos posteriores, como la guerra de Corea.

Este es el caso del transporte de ataque Aragón (ex USS Noble), que, a su entrada en servicio, todavía tuvo tiempo de participar en la Segunda Guerra Mundial y posteriormente combatió en Corea. Por esta razón, las productoras de Hollywood se interesaron en él para recrear desembarcos históricos como el del Día D, e incluso llegó a participar en el rodaje de una película en España con un desembarco en las playas de la Barceloneta.

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