Un 9 de marzo de 1919 parte del puerto de Barcelona el pailebote «Egara» que pondría rumbo a Málaga a donde llegaron el 19 de marzo y de ahí zarparía con destino a Melilla, puerto al que llegaría el día 22.

Este pailebote perteneció en un tramo de su vida a la naviera catalana Navegación Egara S.A. creada por el empresario Francesc Alegre i Roig oriundo de Terrassa. Este pailebote fue construido en 1888 en los astilleros Llompart de Palma de Mallorca y más tarde sería matriculado en Barcelona en 1918 a nombre del armador Manuel Targarona. Desplazaba unas 149 toneladas con 32 metros de eslora, era propulsado por su aparejo y no disponía de motor.

Sin embargo su travesía de marzo de 1919 iba a ser algo complicada ya que debido a la huelga de la Canadiense al «Egara» se lo consideró como desaparecido en un naufragio. En esas complicadas fechas muchos diarios barceloneses se unieron a la causa y otros fueron censurados, posiblemente debido a ello, la falta de información del movimiento de buques propició que el diario El Sol de Almería publicaba la noticia de la desaparición y posterior naufragio del «Egara» en la meseta de Roldán frente al Cabo de Gata, en la breve nota se aseguraba que se había salvado toda su tripulación.

Esta misma falta de información causó que se omitiera su récord de velocidad, que en su travesía de Málaga a Melilla de unas 114 millas empleó unas siete horas, un ligero cálculo devuelve un resultado de unos 14,15 nudos (poco más de 26 kilómetros por hora), mucho más veloz que algunos vapores de la época que no lograban superar los 10 a 12 nudos.

Más datos sobre la historia de este pailebote en el artículo «El vuelo del Egara».