Un día como hoy de 1896 quedaba despachada para la mar la fragata a hélice austro-húngara «SMS Donau» y que al cruzar la bocana del puerto puso rumbo a Cartagena. La «Donau» había llegado unos días atrás, el 11 de abril, y tras cumplir el protocolario saludo a la plaza quedó fondeada en el antepuerto junto a la escollera del este. A su llegada recibieron la visita del segundo comandante el cañonero Pilar de la Armada Española.

Esta fragata despertó bastante curiosidad, ya no por el barco mismo, si no por un pasajero que supuestamente viajaba de riguroso incógnito aunque la gente ya sabía quién era: el archiduque Francisco Fernando de Austria y heredero al trono del imperio. Esa misma mañana el archiduque desembarcó de la fragata y acompañado de algunos oficiales, como si de un turista se tratara, visitaron algunos puntos de interés de la ciudad.

En cuanto a la fragata «Donau», sería construida por Cantiere Navale Triestino, puesta a flote el 15 de octubre de 1874 y entregada el 16 de noviembre de 1876. Desplazaba 2.440 toneladas con una eslora de 76 metros. Era propulsada por su aparejo de fragata más un motor de vapor de 2 cilindros que conectada a un eje le daba 11,3 nudos. Iba armada con 12 cañones de 120 mm, 1 de 70 mm y 4 de 47 mm de tiro rápido.

Larga fue la carrera de esta fragata, y como muchos otros casos ya vistos cuando estos veleros dejaban de ser útiles como buques de combate de primera línea, su función quedaba relegada a la representación diplomática y a la instrucción. Durante la escala en Barcelona la «Donau» estaba en pleno crucero con cadetes a bordo, navegando por el Mar Mediterráneo hasta el Mar Egeo y de regreso recalaron en puertos como Marsella, Palma de Mallorca, Barcelona y Cartagena.