La película Black Sea (2014), dirigida por Kevin Macdonald y protagonizada por Jude Law, narra cómo Robinson, un capitán de submarino desempleado, reúne a una tripulación británica y rusa para recuperar un cargamento de oro nazi hundido en el Mar Negro. Usando un viejo submarino soviético, los conflictos culturales, la desconfianza y la ambición generan tensiones peligrosas en un entorno claustrofóbico.

Para filmar la película, el director Kevin Macdonald utilizó un submarino real, el B-49 de la clase Foxtrot, que ya retirado del servicio se encuentra en el río Medway, en la localidad de Strood (Reino Unido). Actualmente, sirve como barco museo y también ha sido utilizado como lugar de rodaje para películas.

Más detalles sobre esta película en la entrada Black Sea del blog Un barco de película.